Publicat el 24/05/2013 a les 17:00 h. - Regina Navarro -
Como ya hizo durante el curso escolar, el Ayuntamiento quiere garantizar que ningún niño pase hambre. Por esta razón, el Instituto Municipal de Servicios Sociales (IMSS) y el Consorcio de Educación trabajan para localizar niños que puedan tener déficit alimentario durante las vacaciones. Para darle cobertura se utilizará una partida de tres millones de euros para ayudas de emergencia social.
Vídeo 'La alimentación en verano'
Detectar los casos es el primer paso, y por eso, ya se ha enviado una carta a las escuelas para que informen de los casos en los que el final del periodo lectivo pueda suponer que los niños no tengan cubiertas sus necesidades alimentarias. "La escuela nos notificará y nos dirá: en mi escuela hay estos niños que nosotros, desde la escuela, creemos que en verano pueden tener dificultades", ha explicado la teniente de alcalde de Calidad de Vida, Igualdad y Deportes, Maite Fandos. A partir de esta información, los Servicios Sociales analizarán cada caso.
Una manera de trabajar que ya se ha demostrado eficiente durante el curso escolar, ya que con este procedimiento se han localizado 703 familias que han recibido ayudas gracias al trabajo conjunto del IMSS y el Consorcio de Educación de Barcelona.
Así pues, de cara al verano, se continuará trabajando en esta dirección con una inversión inicial de 3.150.000 euros. Es una partida económica destinada a emergencias sociales para las familias, como medicamentos, viviendas y alimentación. Además, los centros abiertos ofrecerán meriendas nutritivas a 1.481 niños, una iniciativa que se ampliará durante el curso 2013-2014 con el objetivo de llegar a los 1.848 alumnos.
Todo ello se complementa con la campaña de vacaciones de verano de este año. Del más de medio millar de actividades de ocio que se ofrecen desde el Ayuntamiento, el 72 % ofrecen servicio de comedor. Una campaña para la que el Ayuntamiento también ha previsto ayudas económicas para las familias con menos recursos. En estos momentos, y de manera provisional, la demanda de ayudas para las actividades de verano se ha incrementado un 25 %. De las 7.276 solicitudes de ayuda recibidas, se han aprobado 6.302, y la partida económica inicial prevista se ha incrementado hasta los 968.692 euros.
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